Fue una jornada emocionante y entrañable donde pudimos ver la evolución que todos los judokas han tenido a lo largo del curso.
Además, el randori, la lucha, es un medio excelente para aprender a gestionar emociones que solo en una competición aparecen. Son incontables sus beneficios: caer y levantarse, luchar con un amigo y luego abrazarse, esforzarse al máximo, aprender a gestionar la frustración y los nervios… y podríamos seguir.
@cnhelios 💙
@hugoburgosdelgado
@ibanbuldain
@joruge77
@lauraterrades